Es una receta que siempre me ha fascinado, es a la vez fast food y comida tradicional. No se, es un poco de todo y la verdad es que desde que la comí en Londres llevaba mucho tiempo dandole vueltas a como hacerla.
No os voy a engañar ha habido un par de intentonas fallidas, no me terminaba de gustar como quedaba la "gabardina" alrededor del pescado porque no debe ser muy gruesa pero si muy crujiente. Finalmente para hacer algo que me gustara decidí alejarme un poco de las recetas tradicionales que veía por Internet y buscar otros rebozados que me dieran ese punto que a mi me gusta. También cambie el pescado que en este caso es halibut y no bacalao pero esto es más debido que es lo que tenía en la nevera el día que me puse con el experimento que a otra cosa.
Bueno lo más complicado es el rebozado así que es por donde empiezo. Mezclo una yema de huevo por 40 gr. de harina de tempura y unos 15 gr. de agua se mezcla bien todo y tiene que quedar una textura que cubra perfectamente el pescado. Tener en cuenta que los huevos no tienen todos el mismo tamaño y que las harinas no son iguales así que es importante que mezcléis primero la yema con la harina y añadáis agua a pocos hasta obtener la textura deseada (si os pasáis un poco con el agua, corregir con más harina). Después freír en abundante aceite hasta que el rebozado dore y el pescado este hecho.
Con las patatas, yo siempre pense que eran fritas normales pero cuando las comí en Londres me dieron la sensación de patatas congeladas pero tenían un toque raro así que viendo que no sabia como reproducirlas correctamente decidí hacer las patatas cortadas en gajos grandes y confitarlas en el aceite unos 10-15 minutos (en una vitroceramica de 12 posiciones hacerlas en el 5) y pasado este tiempo darle un golpe fuerte subiendo a tope el fuego hasta que doren.
Para acompañar lo normal es una salsa tártara, pero como lo hice un día que no tenia previsto no tenia pepinillo así que decidí sustituirla por una ajonesa (no lo considero ali-olí porque es solo mezclar ajo con mayonesa de compra). Por supuesto también debería haberlo acompañado de un pure de guisantes pero no tengo tanta flema británica para eso y esa parte del plato es la que decididamente paso de ella.
1 comentarios:
En mi estancia en Londres, con mi cuadrilla de amigos/as, yo también probé este (único) plato tradicional.
Fue en Candem Town, en el cruce de Candem High ST con Hawley Crescent (bendito google maps), en un restaurante de 2 alturas y unos WC en los que parecía que bajabas al infierno.
La recuerdo con cariño pese al cansancio de cualquier buen turista.
También recuerdo que el puré de guisantes estaba buenísimo, de hecho comí el de varios de mis amigos/as.
Do you remenber?
J.
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