Como sabéis me encantan los gadgets, juguetes, aparatos… en la cocina un montón por lo que siempre ando trasteando. Con las navidades llego a mi casa un nuevo electrodoméstico del cual ya os he hablado otras veces que es la panificadora. Este aparatejo lo que hace es amasar a temperatura constante y con sus programas va dejando los tiempos de fermentación que es quizás lo más difícil con los panes, ya que normalmente hay que hacerlo en sitios oscuros sin corrientes de aire.
Bueno tras las loas al chisme, llegamos a la cuestión principal que no es otra que la elaboración de algo con ella, en este caso una focaccia que básicamente es un pan de aceite italiano que se puede añadir ingredientes, en este caso queso parmesano, romero y aceitunas negras. Los ingredientes son los siguientes:
• 210 ml de agua templada
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• 350 gr de harina de fuerza
• 1 cucharadita de sal
• 1 cucharadita de azúcar
• 1 cucharadita de levadura seca
• 100 gr de queso parmesano rallado
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• romero
• sal Maldon
• aceitunas negras fileteadas
Con la panificadora siempre hay que seguir la misma regla primero los ingredientes líquidos y luego los sólidos. No añadimos el romero, la sal Maldon y las aceitunas que se colocara después sobre la focaccia. Se pone en amasado y cuando nuestro mágico “amigo” acabe con el trabajo duro, estiramos la masa como un dedo de grosor y lo colocamos sobre una placa de horno es entonces cuando añadimos el romero, la sal Maldon y las aceitunas además de una película de aceite de oliva que lo cubra y dejamos reposar dentro del horno (sin encender) 20 minutos, después de ese tiempo horneamos a 200º C unos 20-25 minutos.
Un pan “especial” que sirve para acompañar un picoteo riquísimo o para hacer unos bocadillitos originales y con un punto distinto.
Read more